Los medicamentos falsificados son aquellos cuya identidad, composición y procedencia han sido deliberadamente tergiversadas. El Impacto de las falsificaciones representa un reto para los laboratorios farmacéuticos, ya que compromete la salud pública y la confianza de los consumidores en los proveedores de medicamentos. Frecuentemente, estos productos son elaborados y distribuidos con el objetivo de engañar al consumidor para obtener un beneficio económico, afectando incluso la distribución farmacéutica legítima.
Los medicamentos falsificados pueden ser reconocidos por:
Etiquetas faltantes, de mala calidad o sobrepuestas.
Diferencias en aspecto físico (colores, tamaño, forma) respecto al producto original.
Datos de registro sanitario, clave alfanumérica o número de lote inexistentes o que no corresponden a la referencia.
Estado de conservación: el producto presenta un estado de degradación o deterioro notorio.
Presencia de tachaduras, ralladuras o raspaduras en la información sanitaria.
Precio sospechosamente bajo.

¿Qué información debe tener un medicamento ORIGINAL?
Un medicamento legítimo, distribuido por empresas confiables como Farmacéutica Hispanoamericana, debe incluir:
Denominación distintiva (marca).
Denominación genérica (principio activo).
Forma farmacéutica.
Concentración del fármaco.
Dosis o posología.
Vía de administración.
Número de lote.
Fecha de caducidad.
Datos del fabricante comercializador o titular del registro.

¿Cómo evitar adquirir un medicamento falsificado?
Adquiera medicamentos solo en lugares legalmente establecidos, como farmacias autorizadas que trabajen con distribuidoras de medicamentos en México.
Rechace productos de dudosa procedencia.
No compre medicamentos si los empaques o envases contienen leyendas ilegibles o están en un idioma diferente al español.
Verifique que el medicamento cuente con el número de lote, fecha de caducidad y registro sanitario, y que estos no estén alterados.
Asegúrese de que hologramas o sellos de seguridad estén en buen estado.
¿Qué hacer si identifica un medicamento sospechoso?
Si sospecha haber visto, adquirido o consumido un medicamento falsificado, es recomendable realizar una denuncia sanitaria ante COFEPRIS en las secciones de farmacovigilancia y tecnovigilancia, o ante el departamento de farmacovigilancia del titular del registro sanitario del medicamento sospechoso.